lunes, febrero 03, 2003

Diego apareció por error en mi casa con una botella de brandy y la sonrisa que abarca lo mismo que su uniceja, de derecha a izquierda. ZZZZZZZZZZZZzuuuuuuuummmmmmmmmmmmmm ....tac...tact.....zzzzzzzzzzzzzzzzzzzuuuuuuuuuummmmmmmmmmmmm. . . (chirridos) . . . ¿por qué no ves a la luna?. . . porque ya estoy en ella. . .

Mientras 10 judiciales mantienen abierta la cajuela del coche blanco de vestiduras grises y la calle se parte en dos por una cierra de 5 metros de radio.